Lanzado Calligra 2.9.7, la suite ofimática de KDE sigue su camino

Lanzado-Calligra

Hoy ha sido lanzado Calligra 2.9.7, y según las notas de lanzamiento, diversas fugas de memoria han sido corregidas, permite a los usuarios establecer el estilo del párrafo por defecto para una nota final o de pie, se ha optimizado el formateado de las celdas de una tabla, mejora la gestión de la memoria, y añade iconos de 14 píxeles en la caja de herramientas.

Ahora las celdas de una tabla no se copiarán cuando se intente copiar el texto que tiene en su interior, el botón de dirección de escritura funciona correctamente, los tooltips ahora incluyen atajos de teclado, y es posible pegar dentro de una tabla o párrafo sin romperlo. También permite borrar una tabla seleccionada a través de la tecla de retroceso.

Los usuarios de Calligra pueden ahora sobreescribir una selección cuando se inserta una variable, los iconos de 14 píxeles en la caja de herramientas están ahora por defecto y los colores serán inicializados a negro. El tamaño de los iconos de la caja de herramientas puede ser configurado, dependiendo su tamaño por defecto de la resolución de la pantalla.

Por su parte Kexi 2.9.7 recupera la capacidad de alterar el diseño de las tablas, repara la detección de la clave primaria durante la importación de un fichero CVS y corrige problemas de actualización en la detección de la clave primaria, que fallaba cuando se modificada el valor de “Empezar en la línea”. A partir de ahora ya no fuerza a guardar las bases de datos cuando el usuario cambia las consultas que nunca han sido almacenadas en la vista de datos, ofrece una mejor herramienta para reportar errores y mejores resultados para las sentencias preparadas en SQLite.

Krita 2.9.7

Algunos quizá os estéis preguntando, ¿qué pasa con Krita?, sin duda la aplicación de dibujo es el producto más popular de la suite Calligra, y a todas luces el que ha mostrado más potencial.

Krita 2.9.7 ha incorporado muchas características nuevas, como un nuevo motor llamado Tanget Norma Brushde Wolthera, nuevos iconos para pantallas HDPi, un nuevo selector de color avanzado y pinceles actualizados para un rendimiento mejorado.

También se ha mejorado el soporte de OpenEXR 2.2 en la versión de Krita para Windows, así como el soporte para ficheros PSD de Photoshop y la compatibilidad con Gimp (lo relacionado con los ficheros PSD y Gimp son para Windows y GNU/Linux). Se ha añadido la posibilidad de deshacer a través del botón secundario del ratón, fusionar hacia abajo en la Selección de Máscaras y una característica de “escalado suavizado” en el modo estabilizador de las herramientas de mano alzada.

Krita 2.9.7 también mejora los asistentes y añade la posibilidad de poder convertir cualquier selección en una forma vectorial. Todo esto entre muchas otras características nuevas y la corrección de más de 150 bugs.

Ahora los desarrolladores de Krita están centrados en la próxima versión mayor, la 3.0.

Fuente: www.muylinux.com

Calligra: aplicaciones para la oficina y un poco más

Aprovechando que recientemente salió la nueva versión de Calligra, quería dedicarle un poco de tiempo a cada una de sus aplicaciones. Dicho sea de paso, hace tiempo que estoy interesado en esta suite pero, lamentablemente, nunca le pude tomar el gusto.

Sin embargo, en comparación con LibreOffice, se ve que hay varias diferencias en la forma de presentación de las herramientas, por lo que puede llevar un tiempo adaptarse. Así que, para ir entrado en tema, continuaré escribiendo desde Words. Cabe destacar que Calligra es un fork de KOffice así que, por lo tanto, está destinado a KDE y GNU/Linux aunque también provee un instalador para Windows.
calligra
Words

Como indica su nombre, Palabras, es un procesador de texto estilo WYSIWYG (más sencillamente: “Lo que ves es lo que obtienes”). Tal vez la primer diferencia notable para los que hemos usado la suite ofimática de Microsoft, OpenOffice, LibreOffice o similar, es la disposición de las herramientas básicas como fuente, colores y demás al borde derecho de la pantalla. Parece ser bastante cómodo pues allí debería estar todo lo necesario. Entre las pestañas por defecto tenemos: edición de texto, la cual nos permite darle formato a nuestro texto, crear tablas, agregar símbolos, variable y saltos de página; referencias, para trabajos con citas y/o que deban recurrir a determinada bibliografía; diseño de página, donde tenemos para configurar cómo queremos que la hoja sea aprovechada y para agregar encabezado y pie de página; y, luego, herramientas para dibujo, como flechas y líneas.

Como sería de esperar, podemos crear nuestros propios estilos para ser usados a lo largo del documento a través del diálogo Gestor de estilos, algo que siempre me costó manejar desde LibreOffice y que aquí parece bastante simple de utilizar e intuitivo. En estas opciones podemos elegir el formato que van a tener tanto los caracteres como el párrafo, incluso cómo queremos que emplee viñetas o números y si ese estilo en particular requiere una letra o palabra mayúscula para comenzar el párrafo.

En cuanto a formatos parece admitir lo que se espera: odt, doc y docx, aunque tan sólo puede abrirlos y no guardarlos en el caso de los dos últimos. Lamentablemente no tengo archivos docx para probar, así que intentaré ver con las otras extensiones. Si bien todo parece abrirse correctamente, hay un pequeño detalle que supongo que no tardará en corregirse. Al abrir un archivo desde uno ya abierto previamente, el título de la aplicación cambia al documento nuevo. Al modificarse el archivo primero, vuelve el título a la normalidad. Mientras tanto, no han habido problemas de consideración abriendo archivos que no sean extremadamente complejos.

Volviendo un poco a la interfaz, las herramientas que podemos usar están dadas por medio de acoplables, siendo el más básico y necesario el que permite darle formato al texto. Sin embargo, hay más y se pueden ubicar en cualquier lugar deseado de la pantalla (salvo el borde superior) por lo que uno puede adaptar el programa a su comodidad. No hay muchos acoplables para agregar por lo que parece estar un poco carente de herramientas pero, por otro lado, como procesador de texto tiene todo lo necesario y, por lo tanto, mucho menos cargado que LibreOffice.

Sheets

Ahora le toca el turno a otra de las aplicaciones de oficina más utilizada que es la hoja de cálculo. Se mantiene el mismo estilo de Words: hay paneles acoplables con los cuales realizamos todo lo que necesitemos. En este caso me parece muy conveniente para el formato de celda pues ya viene incorporado y muy a la vista la opción para agregar bordes y fusionarlas. Aun así, las opciones de formato más específicas están dentro de un botón llamado Formato donde podemos cambiar la fuente, el fondo, el tipo de información que irá en la celda y demás.

No parece carecer de herramientas frente a LibreOffice a diferencia de Words. Las funciones que se utilizan dentro de las celdas no varían para nada pues también dependen de OpenFormula. Además, luce bien y se aprovecha muy bien el espacio.

Una característica que me resultó interesante son las plantillas que vienen por defecto que evitan bastante trabajo para quien no acostumbra utilizar esta aplicación. Hay de todo un poco: plantillas orientadas a negocios como balances o facturas, algo más familiar como los gastos de la casa o incluso una tarjeta de identificación. Algo que, de otra manera, podría llevar un buen tiempo armar.

No es necesario volver a repetir (y esto se incluye de aquí en adelante) las características compartidas entre programas como por ejemplo la apertura de archivos creados con Microsoft Office. Además, los paneles acoplables suelen ser muy similares entre aplicaciones como si, de cierta manera, estuvieran todos plantados sobre exactamente la misma base.

Stage

Stage sirve para realizar presentaciones con diapositivas al estilo Impress o PowerPoint. Al igual que con Sheets, la cantidad de plantillas para comenzar a trabajar es decente y puede resultar bastante cómodo al momento de preparar algo rápido y sin demasiado esfuerzo. Incluso tenemos algunas relacionadas con el software libre como una sobre KDE y otra con nuestro amigo Tux, el pingüino.

La interfaz gráfica no es muy distinta a lo que estamos acostumbrados a diferencia de Words, tal vez. Tenemos la lista de diapositivas a la izquierda y algunas opciones a la derecha. Podemos optar entre distintos diseños predeterminados como título y texto, dos columnas, gráficos o imágenes. Al igual que Words, todo lo necesario está al alcance de la mano con los acoplables, donde tenemos opciones para la alineación de los objetos, tipo de borde y relleno.

Con respecto a las transiciones, aparentemente infaltables en las presentaciones de tipo escolar (por decir algo), tenemos de todo tipo y forma que se pueden previsualizar durante la edición de la presentación. Además cada transición tiene diferentes alternativas. Por dar un ejemplo, desvanecer, tiene la posibilidad de aparecer o desaparecer desde o hacia un color y mezclarse con la diapositiva siguiente o anterior.

Al igual que Impress, podemos agregar notas y clasificar las diapositivas. Sin embargo, no he podido encontrar el modo folleto y esquema que incluye en el primero. Asimismo, en las opciones de impresión podremos lograr que aparezcan las diapositivas en miniaturas como lo hace dicho modo.

Por otro lado, Stage tiene una función interesante llamada Efecto de filtro que nunca antes había visto (cabe destacar que no frecuento usar diapositivas) y se repiten en otros programas de la suite como Braindump y Flow. Básicamente son operaciones matemáticas a aplicar sobre las imágenes o figuras. Se asemejan a los filtros de los programas de edición de imágenes.

Otras aplicaciones

Para mantener una longitud razonable del artículo, ahora veremos el resto de las aplicaciones de Calligra las cuales no son de tanta importancia o no tan frecuentes en la gran mayoría de los usuarios como las anteriores. Para comenzar está Kexi,que es un tanto peculiar. Su presentación es distinta a las ya mencionadas. Cuenta con un botón de menú estilo Firefox en la parte superior derecha y el resto de los botones son pestañas. Esta aplicación se encarga de las bases de datos. Podemos crear una a partir de plantillas (tan sólo dos: contactos y listas de películas) o armarla a gusto.

Es posible crear nuestra base de datos en un archivo para acceso local o trabajar directamente sobre un servidor tal como MySQL o Sybase. Luego, nos encontramos con lo esperado: tablas, consultas, formularios, etc. Al igual que el resto de las aplicaciones no parece muy complicada de usar al no tener una gran variedad de opciones a la vista, sino lo necesario y fundamental. También tenemos compatibilidad con otras base de datos como mdb (de Access) y tsv a través de importación, pero lamentablemente odb (de Libre/OpenOffice) no parece ser compatible por ahora.

Una aplicación de Calligra a la que le tengo mucha fe es a Author. Por ahora es técnicamente lo mismo que Words pues es relativamente nueva. Básicamente plantea ser lo que Krita es para pintores según su nota de lanzamiento. Un agregado que prontamente estaría apareciendo en la rama principal (tanto de Author como de Words) es el modo sin distracciones, el cual es un elemento tal vez no muy novedoso pero ciertamente útil. Así que por el momento habrá que ir esperando pero, mientras tanto, se puede recurrir a Plume-Creator o Storybook que son de este estilo.

Calligra Plan es una aplicación de aspecto empresarial que funciona como un registro de tareas y su desarrollo teniendo en cuenta los recursos disponibles, el tiempo y días de trabajo. Muchos resultados no pude obtener con el programa; por lo tanto me atrevo a decir que, a diferencia de la mayoría del resto de los componentes de la suite, no es una aplicación muy intuitiva, es necesario por lo menos leer un poco de qué se trata antes de empezar a realizar las cosas. Para los interesados, Plan es capaz de abrir archivos de Microsoft Project, su competencia paga.

Flow sirve para realizar diagramas de flujos y esquemas, muy útiles a la hora de ilustrar algo en un texto por ejemplo. Lo primero que me llamó la atención es la variedad de elementos a utilizar. Desde imágenes, texto y videos hasta partituras y circuitos electrónicos, además de bloques, flechas y demás. No es muy complicado de usar y bastante intuitivo. Lamentablemente falla en algunos casos por lo que habría que ir guardando el trabajo bastante seguido. De todos modos es entendible pues ha comenzado a ser parte de Calligra desde su versión 2.4. En la imagen siguiente hay algunos ejemplos:

Voy dejando lo mejor para el final. Ahora, una herramienta que me entusiasma probar de Calligra: Braindump. El programa nos presenta con una pizarra en blanco donde nosotros podemos volcar nuestras ideas, tal como el nombre implica. Las herramientas con las que contamos son simplemente para expresarse. Por ejemplo el clásico lápiz, trayectoria (para dibujar polígonos o curvas) y caligrafía. Además contamos con las formas que otras aplicaciones de Calligra poseen. Éstas son imágenes, bloques de texto y gráficos. Un detalle interesante que tiene Braindump es que se ajusta automáticamente la vista para que entren todos los elementos en pantalla.

Finalmente, y para terminar, vienen Krita y Karbon. Ambas son herramientas orientadas al dibujo. La primera a la pintura y la segunda al diseño vectorial. En cuanto a Krita, es una aplicación bastante más trabajada que el resto. Tiene muchas más herramientas e incluso una interfaz muy distinta. Se puede elegir entre varias herramientas de pincel y además, como otras aplicaciones, cuenta con unas cuantas plantillas para comenzar, entre ellas tiras cómicas. No quisiera entrar en comparaciones con sus competencias pues no es un tipo de aplicaciones que use, por lo tanto, si alguien lo ha usado o lo usa, puede compartir su experiencia en los comentarios.

Por otro lado, Karbon, no luce tan profesional, sino como una herramienta adaptada a la interfaz del resto de las aplicaciones de Calligra. Sin embargo, el sitio oficial afirma que es una aplicación tanto para los que recién comienzan con el diseño vectorial como para los profesionales pero, nuevamente, mucho de esto no puedo dar mi opinión pues no es algo que use o haga. En cuanto a formatos es compatible con odg, svg y wmf en su completitud (es decir, tanto para cargar como para escribir).

En conclusión, Calligra es un conjunto de aplicaciones de oficina muy completo con todas las aplicaciones necesarias y un par más. En general, se aprovechan bien los espacios pudiendo utilizar buena parte de la pantalla y no perder lugar con cosas innecesarias. Además, todas las aplicaciones comparten acoplables lo que facilita el pasar de una a otra; es decir, supongamos que únicamente uso Words y necesitaría usar Sheets, no tengo que preocuparme por ver cómo se logra un mismo resultado porque, salvo por las herramientas exclusivas de cada programa, todo se mantiene igual y se usa de la misma manera.

Por otro lado, existen unos ciertos problemas de inestabilidad aquí y allá. Me ha pasado encontrarme con errores que me cierran el programa de tanto en tanto (especialmente en Flow). Aun así se puede recuperar lo que se estaba haciendo pues el programa va almacenando una copia de seguridad. Después de eso, tiene todo lo que particularmente yo necesito; igualmente siento que necesita de un poco más de tiempo. Por ahora sigo con LibreOffice pero, de vez en cuando, voy a estar revisando cómo progresa porque, sinceramente, me gusta el camino por el que va yendo Calligra.

Fuente: http://www.muylinux.com/2013/08/02/calligra-2-7-disponible/

Calligra, la alternativa a Office de código abierto

Al hablar de ofimática, lo primero que nos viene a la cabeza es Microsoft Office, la suite ofimática de Microsoft que se ha convertido con el paso de los años en un estándar. Por suerte, ha surgido alguna que otra alternativa a Office, como OpenOffice/LibreOffice o Google Drive. Con anterioridad hemos hablado en Bitelia de alternativas a Office para Windows 8, entre las que hoy destacamos Calligra. Aunque surgió inicialmente para Linux, también está disponible para Windows, por lo que resulta una alternativa interesante y gratuita a Microsoft Office.

calligra2Calligra es una versión mejorada de KOffice, el paquete ofimático para KDE, uno de los escritorios más populares de Linux. Actualmente, está disponible en las principals distribuciones Linux y, con su propio instalador, en Windows. Teóricamente puede instalarse también OS X, pero el proceso no es demasiado sencillo. ¿Qué ofrece Calligra? Pues prácticamente de todo: procesador de texto, hojas de cálculo, presentaciones, planificador de tareas, generador de diagramas, base de datos e incluso un editor gráfico. Respecto a la compatibilidad de formatos, los distintos componentes de Calligra permite abrir, crear y editar documentos de Office y Open Document, el formato estándar.

Calligra Words: La aplicación imprescindible de cualquier suite ofimática que se precie, el procesador de texto. Como ocurre con los demás componentes de Calligra, este editor se organiza entorno a una ventana principal, donde editar y redactar el texto, y un panel lateral derecho que muestra acceso a las herramientas más comunes. Ofrece prácticamente las funciones de cualquier procesador actual, destacando su gestor de estilos, para formatear texto por bloques de forma rápida, y plantillas básicas, para no empezar de cero. Sin embargo, su verdadero potencial está en el panel lateral, desde donde puedes editar texto cómodamente.

Calligra Stage: Tras los procesadores de texto, la segunda aplicación más demandada es el editor de presentaciones. En el caso de esta aplicación, lo primero que destacan son sus plantillas, que aunque no son muchas, son una buena forma de empezar con nuestra presentación particular. Como en el caso anterior, el panel lateral derecho permite cambiar el estilo de cada diapositiva, para incluir texto, gráficos o alguna imagen. Además, también sirve para reproducir las presentaciones una vez estén terminadas, y las herramientas de dibujo incluídas, aunque básicas, sirven para su propósito.

Calligra Sheets: En tercer lugar, destaca la herramienta para la edición de hojas de cálculo de Calligra. Como en los casos anteriores, ofrece plantillas para casos concretos.

Calligra Flow: Una herramienta para crear diagramas, ideal para mapas de ideas y toda clase de gráficos de este tipo. Los resultados no son muy vistosos visualmente pero sí sirven a su propósito para plasmar ideas complejas de forma más simple, con un buen surtido de cajas y elementos con que generar los diagramas.

Kexi: Aunque han perdido popularidad dentro de los paquetes ofimáticos, las bases de datos siguen siendo importantes para organizar gran cantidad de información y realizar búsquedas. En este sentido, Calligra ofrece una herramienta para crear bases de datos relativamente fácil de usar y a la altura de otras aplicaciones similares.

Calligra Plan: Todas estas aplicaciones sirven para cumplir un propósito, pero sin una herramienta que ayude a organizar y jerarquizar tus tareas, de poco servirán si no tienes tiempo suficiente para utilizarlos. En ese sentido, Calligra Plan es una herramienta a tener en cuenta, que organiza tareas y subtareas en formato lista y en una línea de tiempo. Con este organizador podrás gestionar no sólo tareas individuales, sino también proyectos enteros, propios

Krita: Para terminar, una aplicación que merece ser analizada por separado. Este potente editor gráfico, a la altura de GIMP, por poner otro ejemplo de código abierto, permite editar imágenes de forma profesional con pocos conocimientos. Está enfocado al dibujo, con una paleta de dibujo muy completa, pero también sirve para edición. Su aspecto es similar al de aplicaciones similares. En el caso de Windows, necesitarás descargar el instalador aparte del de Calligra. Además de esta herramienta, con Calligra se incluye Karbon, un programa de dibujo vectorial.

Está claro que Calligra no es Microsoft Office. Hay que tener en cuenta la diferencia de recursos con que cuenta uno y otro proyecto para su desarrollo y mejora. Un ejemplo caro está en el uso de plantillas, cuya colección en Office es interminable, y que en Calligra debería mejorar de cara al futuro con repositorios de los propios usuarios. En cualquier caso, como paquete ofimático, Calligra es muy completo, ya que además de las herramientas básicas, ofrece aplicaciones complementarias que no todas las suites suelen incluir. Por otro lado, el aprovechamiento del espacio en pantalla con el panel lateral derecho lo convierte en una alternativa a Office a tener en cuenta. Aún hay mucho camino por recorrer hasta que Calligra haga sombra a Office u OpenOffice, pero está claro que ahí está y que ofrece garantías en los principios básicos de la ofimática.

Fuente: http://bitelia.com/