El “gurú” del software libre, Richard Stallman, como es conocido mundialmente estuvo en Cochabamba para promover su filosofía y aplicación respecto al movimiento al que define como la expresión más alta del “compartir”, ocasión en la cual también sugirió “reducir el poder de los derechos de autor” para democratizar su acceso digital.
Stallman explicó durante su corta estadía en el valle y frente a un grupo de apasionados por la tecnología digital en el mARTadero, que los derechos de autor tienen una duración de hasta 100 años después de la muerte del autor, en el caso de México.
Ante la amplitud de tiempo a la cual calificó de “absurda” propuso que la misma se reduzca a 10 años después de la publicación de la obra, puesto que el ciclo de publicaciones es realizada cada tres años.
“No digo que 10 años sea el paso perfecto. No puedo saberlo (…) Otros dicen cinco años, no quiero ser tan radical”, dijo a tiempo de ponderar que “mientras una obra siga bajo el derecho de autor tiene poderes de detener los derechos de los usuarios”. Asimismo explicó que los editores utilizan la tecnología digital para imponer una lógica de “pagar por cada mirada” y ello es realizado, a través de una lógica “malévola” de tecnología donde los usuarios son restringidos a través de un software privativo.
Stallman explicó que existen dos tipos de software: el libre, por medio del cual los usuarios tienen el control del programa y el privativo, a través del cual el programa controla a los usuarios, razón por la cual urge legalizar el software libre.
En el caso de la venta de los libros digitales, Stallman, informó que su difusores no respetan la propiedad privada puesto que en la práctica estos sólo emiten una “licencia de usuario final” para que los compradores la usen.
A esta práctica la llamó “tecnología perversa”, razón por la cual instó a no aceptar ningún producto que prive la libertad de usarlo. Ante ello, propuso legalizar el “compartir” entendida como “distribuir de manera no comercial las copias exactas de la obra”. De igual manera, informó que las obras destinadas al uso práctico como, por ejemplo, las recetas de cocina, además de las obras educativas que incluyen enciclopedias y diccionarios, entre algunas deben ser compartidas. En cuanto a los ensayos, testimonio, de opinión y las conferencias deben ser compartidas, dijo.
Su vida
Richard Matthew Stallman (nacido en Manhattan, Nueva York, 16 de marzo de 1953), con frecuencia abreviado como «rms»,1 es un programador estadounidense y fundador del movimiento por el software libre en el mundo.
Es creador del editor de texto GNU Emacs,2 el compilador GCC,3 y el depurador GDB,4, entre otros.
En el caso de la venta de los libros digitales, Stallman informó que sus difusores no respetan la propiedad privada, puesto que en la
práctica estos sólo emiten una “licencia de usuario final” para que los compradores la usen.
Sobre las obras de arte y la forma de apoyar a los artistas
Respecto a las obras de arte propuso legalizar el hecho de compartirlas y planteó dos formas de apoyar a los artistas: la primera que consiste en distribuir el monto que el Estado dispone para cada artista a través de sondeos que midan su éxito, aplicando una fórmula de raíz cúbica y la segunda promover los pagos voluntarios.
El líder del movimiento mundial por el software libre arribó a Bolivia invitado por la vicepresidencia del Estado Plurinacional y el proyecto GeoBolivia.
Durante su estadía en el país participó del primer Congreso Nacional de Ciencias y Tecnología de la Información organizado por la Universidad Privada Domingo Sabio, en Potosí y promovió el software libre, a través de conferencias, en La Paz y Cochabamba.
Es también inventor del concepto de copyleft (aunque no del término), un método para licenciar software de tal forma que su uso y modificación permanezcan siempre libres y queden en la comunidad de usuarios y desarrolladores.
LOS CUATRO PASOS FUNDAMENTALES
¿Qué es el software libre?
Revista emeequis (Fragmento)
Imagínese que compra un auto nuevo. Pero usted tiene prohibido abrir el cofre y conocer su motor, identificar el tanque de gasolina, la batería, el carburador. Imagine también que no puede cambiarle la radio, ponerle rines deportivos o cambiarle el escape. Por último, imagine que ese auto en realidad no es suyo, sino que usted sólo tiene una “licencia” para usarlo, además no puede prestárselo a nadie.
¿Absurdo? Pues eso es muy parecido a lo que sucede actualmente con la industria del software. “¿Por qué permitimos que funcione así?”, se pregunta Stallman. El software libre es la alternativa a ese modelo que las más grandes empresas de la programación han impuesto.
“El software libre es aquel que respeta tu libertad y la solidaridad social de tu comunidad”, define Stallman. La otra posibilidad, añade, es el software privativo, llamado así porque “priva a sus usuarios de la libertad”.
El software libre debe reunir cuatro características :
1) La libertad de ejecutar el programa para cualquier propósito.
2) La libertad de estudiar cómo funciona el programa y la posibilidad de adaptarlo de acuerdo a necesidades
3) Libertad de distribuir copias
4) La libertad de mejorar el programa, para toda una comunidad.
Fuente: lostiempos.com
Quien dirige esta iniciativa es el jefe de Operaciones del CNTI, Carlos Parra, en cuya oficina se desarrolla el núcleo del Proyecto Canaima, como sistema de operación básica.
